Prueba el método más simple y efectivo para enraizar grosellas.
A diferencia de la propagación por esquejes, este método ofrece un resultado del 100%.
Sigue estos pasos para multiplicar tus grosellas con éxito.
Primero, quita cuidadosamente una capa de corteza entre dos yemas.
Para aumentar la eficacia, trata la parte del tallo sin corteza con un estimulador de crecimiento de raíces.
Luego, haz un agujero en la base de un vaso de plástico de 200 ml y colócalo sobre el tallo.
Llena el vaso con tierra y usa cinta adhesiva para sujetarlo a la rama.
Para evitar que la tierra caiga, cubre el vaso con otro igual.
Solo necesita ser regado junto con la planta.
Una vez que se hayan desarrollado fuertes raíces, puedes cortar con seguridad las capas aéreas.
El siguiente paso es plantar las grosellas a partir de esquejes.
Corta esquejes con al menos 5 yemas vivas, evitando tallos demasiado delgados.
Sumérgelos en agua y cámbiala regularmente.
Prepara agua con miel, agregando una cucharada de miel a un litro de agua.
Corta los esquejes en secciones de 3-4 cortes de 1,5-2 cm en el lugar donde crecerán las raíces.
Mantén la temperatura del aire alrededor de 25 °C para una mejor propagación.
Después de 3-4 semanas, podrás ver los primeros brotes y sistemas de raíces en desarrollo.
¡Buena suerte!